Su original obra arquitectónica denota una clara fundamentación en temas conceptuales que tienen su origen en una actividad polifacética desarrollada en los ámbitos de la pintura, la escultura y la instalación.
Esa dedicación paralela a lo largo de toda su carrera es la base de una filosofía centrada en la definición del juego de las energías naturales y su interacción con la materialidad constructiva.
La exposición contenía numerosos dibujos, fotografías, maquetas, esculturas y piezas que dieron forma a más de treinta obras realizadas y algunos proyectos de concurso que dan idea de un programa creativo vital unitario y una capacidad singular para transitar por diversos medios expresivos. Este gran programa vital quedaba así, ordenado en la exposición integrando lo cronológico y el zodiaco conceptual que aúna el conjunto de sus obras.